Estaba pensando en el impacto que tenemos en el mundo, poco o mucho,
sea lo que sea vamos dejando una huella, tal vez una huella que no todo el
mundo conoce, pero ahí está, porque formamos parte. Estaba platicando de
esto con mi esposo hace días, de cómo sin saber podemos afectar, para bien o
para mal, a las personas. Todo esto me dejo pensando por días, analizando y por
ende investigando un poco más sobre este “efecto”. ¿Cuántas veces nos topamos
con personas en nuestro camino? Y por camino me refiero a la vida claro.
Y ¿cuantas veces nosotros somos quien nos encontramos en el camino de otro?...
Comencé a sentirme como muy “responsable” de mí, mis actos, y mis
palabras. Y lo mejor comenzó cuando comencé analizarme a mí. Y no analizarme en
un sentido “psicológico”, si es que así se dice. Sino más bien como en una
forma de hacer una pausa y contestar una serie de preguntas, preguntas a las
cuales uno solo y en una manera intima contestaría.
Tal vez haya personas que vayan a un ritmo muy acelerado y no tengan
tiempo para hacer una pequeña pausa, pero si algunas vez has sentido esta
responsabilidad o sientes que algo no está haciendo sentido, te comparto estas
preguntas:
¿Qué tan honesta contigo misma eres al día?
¿Cuándo eres honesta contigo misma, eres congruente
con tus acciones?
¿Qué estás haciendo cuando tienes
miedo, cuando te sientes vulnerable?
¿Qué tanto de ti están conociendo los
demás?
¿Quién te está definiendo en estos momentos?
¿Estás haciendo algo por ti, cuidándote, siendo
constante?
¿Estás haciendo lo correcto, aun cuando nadie te
ve?
¿Estás en el lugar, con la gente y haciendo lo que
quieres?
Que no vayamos dando un mensaje equivocado, porque no sabemos cómo
podemos impactar. No esperes mucho tiempo para hacer aquello que tienes dando
vuelta en tu cabeza, alguien más puede necesitar de esas palabras o ese acto de
amor, o valentía.
Con cariño,
Vianey
Ok... tal vez suene un poco trillado...
ResponderBorrarPero una simple sonrisa puede cambiar el día de otra persona.
Me ha pasado, y es así cuando me doy cuenta del impacto que podemos tener, digo... si con gente desconocida con la que nos topamos una sola vez en la vida nos puede cambiar el humor por algunas horas con una simple acción... imagínate con las personas que convivimos todos los días!!!
Hay días buenos, y días malos... días que sientes que la frustración te engaña pensando que no vas por buen camino, pero tomándonos unos minutos para "nosotros" y apapacharnos, consentirnos y analizarnos puede borrar la frustración.
Muy lindo tu post Viane ^^
Saluditos.
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